5 de mayo de 2006

Cómo sobrevivir a unas semanas de infarto y no temer recordarlo (1ª parte)

Ahora que nos acercamos a unas fechas tan señaladas como son nuestros queridísimos exámenes, voy a pasar a elaborar una serie de entradas bajo un mismo título con el propósito de contar mi propia experiencia conforme la desesperación vaya en aumento, por si a alguien le sirve de algo, o está lo suficientemente aburrido para tratar de leerlo.

Aprovecho para desear a todo el mundo suerte en estos días que va a venir, que nunca nos viene mal.


Semana 1

Y eso que había un día menos... Mayo ha empezado un poco cuesta arriba, está claro. Es lo que pasa cuando aún queda tiempo y uno quiere estar a todo, porque ve que, aunque pensaba que le sobraba tiempo para rascarse las narices bien a gustito, al final no es así. Todo aparece de repente (Oye, pero eso para cuando era?? Qué?? Mañana?? Y esto otro?? Cómo que para la semana que viene??) Y el problema viene porque hay MUCHO todo.

Además, siempre hay un cierto sector de profesorado que se dedica estos días a complicarnos un poquito más la existencia... Véanse sino casos de decidoyoquienhacelapresentacion o de documentacionyexamenoralqueoshabeispensado. No quieres taza? Pues taza y media!! Como si por nosotros mismos no tuvieramos ya nuestros problemas y discusiones con cualquier ente que se nos descontrole un poquito (Realmente es normal eso de que un programa vuelva 7 líneas atrás así de repente??)

Pero bueno, que no hay que agobiarse... eso dicen. Optimismo, y tal... que lo que tenga que ser, será. Este finde parece que hasta el tiempo quiere que nos quedemos encerrados en casa estudiando, yo por mi parte me parece que le voy a tener que hacer algo de caso (en la medida de lo posible, claro, tampoco hay que exagerar... además hay carrera de fórmula 1, y eso es "sagrau")

Después de todo todavía es la primera semana, es el momento de ponerse a planificar las cosas que verdaderamente importan para superar los exámenes con éxito: aprovisionamiento masivo de chocolate tanto en forma de galletas como de tableta, corte de pelo (no sea que a final de exámenes asustemos), desarrollo de planes veraniegos y, evidentemente, aprovisionamiento indiscriminado de tests, apuntes, exámenes, ejercicios y demás material de años anteriores para elaborar las "quinielas" con fundamento (aquí habrá que preguntar a los que saben de apuestas, que tienen un don innato para esto... o no...)

En fín, que ya me he aburrido de hablar para no decir nada y que si alguien ha estado lo suficientemente aburrido para leer esto se alegrará de saber que ya termina y que se puede ir a estudiar tranquilamente.
Próximo capítulo dentro de (así a ojo) una semana.

Que os divirtais...

No hay comentarios: